Buenos Aires, 3 de enero de 2020. A pocas horas de que se venza otra vez el contrato (que ya fue prorrogado dos veces) con Metrovías para la operación del subte porteño, la firma de Benito Roggio informó que obtuvo una nueva extensión hasta que se resuelva la licitación que sólo tiene dos oferentes: la propia Metrovías y la compañía francesa Keolis que está asociada a Helport, propiedad de Eduardo Eurnekian.

Metrovías envió el viernes pasado una nota a la Comisión Nacional de Valores (CNV) para informar que sigue siendo concesionario del subte hasta nuevo aviso: “A través de la adenda suscripta, se dispuso extender el plazo del AOM (Acuerdo de Operación y Mantenimiento), hasta tanto el adjudicatario de la concesión prevista en el artículo 1 de la Ley 5885 tome efectiva posesión del servicio de conformidad con lo prescripto por Ley 4472, la Ley 4790, la Ley 5885 (texto consolidado por la ley 6017), la Ley 6102, la Resolución 3298/18 y la Resolución 3360/19”.

Metrovías maneja el subte porteño hace 25 años y desde 2019, cuando se llamó a licitación a otros oferentes, mostró su intención de renovar la concesión. En un comienzo, eran tres las oferentes. Además de la empresa del grupo Roggio, pulseaban la citada Keolis y la también francesa Ratp DEV. Esta última se bajó de la licitación a comienzos de diciembre alegando la volatilidad económica de la Argentina.

Mientras tanto, en la apertura de sobres con la propuesta técnica realizada por el Gobierno porteño, la semana pasada Keolis tuvo la mejor calificación. En este contexto y según explican desde el sector, el próximo paso será decisivo para que se resuelva la situación en el mediano plazo. Se trata de la propuesta económica donde las empresas que compiten por la licitación establecen el monto del canon que están dispuestas a pagar para prestar el servicio. Por el momento, no hay fecha precisa para la apertura de estos segundos sobres. En lo formal, podría ser esta misma semana, pero las empresas dudan que eso sea posible.

Cuando se complete la licitación regirá un plazo de tres meses para que el nuevo operador del servicio se adecue. Y también deberá firmarse el contrato de concesión. La nueva prórroga prevé que el actual servicio de Metrovías finalice en ese momento, salvo que resulte nuevamente elegida.

La decisión fue tomada de manera unilateral por el directorio de Sbase y será hasta que finalice el proceso de licitación. Con un pésimo servicio, tarifazos, muertes obreras y hasta reconociendo material cancerígeno en formaciones compradas por la gestión Macri y haber entregado coimas, el Grupo Roggio viene estando a cargo del subterráneo hace 25 años.

El proceso para adjudicar la concesión del servicio subterráneo a una nueva empresa comenzó en febrero de 2018, pero la resolución del mismo aún está lejos de concretarse. 

Las empresas que participan del proceso son dos: por un lado la propia Metrovías, con asesoramiento de las alemanas Deutsche Bahn y Siemmens; y por el otro, el consorcio Keolis-Helport, integrado por el grupo francocanadiense (Keolis), la firma Helport de Corporación América (del empresario argentino Eduardo Eurnekian) y una subsidiaria del Metro de Londres (Transport Trading Limited).

La empresa Metrovías se hace cargo de la gestión del subterráneo desde el año 1994, en pleno auge del gobierno menemista que se ocupó de privatizar todas las empresas de servicios y transporte que pudo. Durante los 25 años de “trayectoria”, la calidad del servicio nunca fue prioridad para quienes deciden cómo viajan millones de usuarios pero que jamás van a tomar un subte en su vida. 

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