Buenos Aires, 11 de febrero de 2022. La Unión de Trabajadores de la Educación (UTE), entidad de base de la CTERA, informó mediante un comunicado de prensa que el día miércoles pasado "luego de numerosos reclamos desde principios de enero, se llevó adelante la reunión de Mesa Salarial con la presencia de funcionarios del Ministerio de Educación y sindicatos docentes." Sin embargo, el encuentro dejó sabor a nada. Es que "Los representantes del gobierno de la Ciudad no realizaron ninguna propuesta, ni ofrecimiento salarial para el año 2022 y se pasó a cuarto intermedio sin fecha definida."

El silencio oficial respecto de la cuestión salarial a pocos días de iniciarse el nuevo ciclo lectivo, sin palabras "raras" al decir de la ministra Acuña, adelanta un escenario de conflicto, probablemente alentado desde el gobierno en su cruzada contra el sindicalismo y la escuela pública. 

El gremio conoce sus expectativas y las publican. "Desde la UTE planteamos que el aumento 2022 debe superar la inflación del año en curso y generar un proceso de recuperación de lo perdido durante los últimos años de la gestión de Horacio Rodríguez Larreta. Debe ser una Mesa Salarial abierta todo el año para poder monitorear, corregir y asegurar que lxs trabajadores de la educación le ganemos a la inflación". Como se percibe, muy lejos del silencio oficial.

Más allá de la demanda de recomposición salarial paulatina frente a la inflación pasada y para recuperar más rápidamente los ingresos perdidos, UTE reclama también un bono y otras demandas. "Continuamos reclamando en el día de hoy un bono de $20000 para febrero, acorde a los bonos otorgados por nación y provincia de Buenos Aires, la eliminación de las categorías y topes de las asignaciones familiares, condiciones dignas de trabajo y salud para lxs docentes y estudiantes, estabilidad laboral para todxs lxs docentes de nivel secundario en todas sus modalidades y superior, y mejores condiciones de infraestructura escolar".

La subejecución de los presupuestos de infraestructura escolar tiene costos directos y colaterales. Casi le cuesta la vida a un operario el martes pasado. Esa mañana el tablero de luces de la Escuela 8 del distrito 6to, ubicada en Maza 1935, explotó mientras se realizaban obras en la institución. Un obrero resultó herido mientras instalaba paneles solares cuando sucedió la explosión y está siendo atendido por quemaduras en su cuerpo. "Esta situación podría haber sido mucho más grave teniendo en cuenta que el tablero se encuentra en el mismo lugar que las calderas y que se encontraba presente el personal docente y administrativo de la escuela, que tuvo que ser evacuado por la explosión", denunció UTE.

Por otra parte, la organización gremial exigió al gobierno que "informe a la comunidad si existían las medidas de seguridad y protección correspondiente para estos trabajos". Nadie quiere que vuelvan a morir otras Sandra y otros Rubén por escuelas en mal estado.

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