Política | Regresó un clásico del verano

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Calor sin electricidad

Mientras persisten las altas temperaturas en la ciudad, se agravan los cortes de luz. Llegan a 70.000 domicilios sin suministro eléctrico en el AMBA, por fallas en la red de suministro. Pese a las elevadas tarifas, las distribuidoras no hacen mantenimiento preventivo de la infraestructura y sólo reparan los desperfectos una vez que se producen. Los cortes ocurren pese a la caída del consumo de los sectores productivos y aunque existe capacidad de generación que no se aprovecha por abandono de obras claves para reforzar la red energética. Por Mailén González Buenos Aires, 17 de enero de 2025. Miles de usuarios se vieron afectados por cortes de luz a raíz de los desperfectos en la red de distribución de energía, provocados por el aumento esperable del consumo de electricidad debido a la ola de calor en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). Los barrios porteños de Caballito, Villa Crespo, Villa Lugano, Paternal y Almagro, en la ciudad, están entre los más damnificados.

Por las altas temperaturas, se disparó el consumo eléctrico y pone en alerta al sector. Esta semana se presentó con jornadas de calor extremo, hasta hoy que se anticipa la probabilidad de lluvias, aunque un 40%, según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) por lo que hay una plan de cortes programados en caso de colapso del sistema. Ayer hubo un pico de consumo por las temperaturas que llegaron a los 36°.

El aumento del consumo eléctrico durante el verano, impulsado por las altas temperaturas, puso en jaque a la infraestructura energética de Argentina. El desafío de abastecer a todos los habitantes y actividades productivas tiene un impacto significativo en el desarrollo económico y la industria.

En la última década, el país enfrentó situaciones críticas durante las olas de calor en los meses de diciembre, enero y febrero. Como las temperaturas que superan los 37 grados que anunciadas para esta semana en Capital Federal y Provincia de Buenos Aires. El incremento abrupto de la demanda energética, muchas veces culmina en cortes de energía.

Los especialistas explican que “Lo que faltan son obras necesarias de transporte en las redes de alta tensión, para que la energía llegue a lugar donde se produce. En parques eólicos y solares están esperando que le den el visto bueno para ingresar al sistema, porque uno de los problemas es la falta de infraestructura en el transporte”.

Argentina presenta un potencial energético notable gracias a sus parques eólicos y solares, pero estos recursos no pueden ser aprovechados debido a la falta de transporte de redes de alta tensión. Las altas temperaturas ponen en jaque el suministro energético en las grandes ciudades como CABA, provincia de Buenos Aires y Córdoba.

Sin embargo, esto sucede ahora cuando el consumo de energía de la industria se desplomó un 18% en enero. Según el relato oficial, el sistema energético no tiene capacidad para abastecer la demanda ante el pico de consumo en medio de la suba de temperaturas y la supuesta reactivación de los sectores productivos. Así justifica el Gobierno la masiva importación de energía de Brasil, que reveló LPO en exclusiva.

Pero esa narrativa se choca de frente con los datos oficiales de consumo eléctrico. Los números son elocuentes. El consumo de energía del entramado productivo se derrumbó en promedio un 13.6% en lo que va de enero, respecto a diciembre, cuando se comparan los picos de consumo. "La luz al final del túnel es un tren que viene de frente", reconoció un industrial.

Mientras lo antes dicho pasaba con la industria, en comercios y servicios cayó un 7.3%. Ahora, lo llamativo es que en los sectores estrella del modelo de Milei, minería e hidrocarburos, el consumo de energía también cayó un 2.3%, según un relevamiento en base a datos oficiales.  

Si se compara con enero del año pasado la caída es aún más dramática: el consumo de energía de la industria cayó un 27.5%. Y si se mira al interior del sector queda claro cuales son las ramas más afectadas por el modelo de Milei y Caputo, pese a la propaganda oficial.

El consumo de energía de la industria automotriz cayó en enero un 33,9% respecto a diciembre. La industria textil fue por lejos la más afectada con una impresionante caída del 59,7% y la construcción también cayó un 20,2% en enero. Mientras que la industria de la madera y el papel consumió un 37,3% menos de energía este mes y la metalúrgica un 21,9%.

La situación es tan crítica, que un directivo de la UIA reconoció a LPO que el cuadro de situación fabril es una "tragedia". "La luz al final del túnel es un vagón que viene de frente", respondió este industrial al ser consultado sobre la notable reducción de la demanda de energía en las fábricas.

Esta menor actividad que sugiere mirar el consumo de energía se confirmó este miércoles con el dato de la utilización de la capacidad instalada que difundió el Indec, que dio un 62,3% en noviembre, lo que representa una caída de casi 4 puntos respecto al mismo mes del año anterior, cuando había alcanzado el 66,4%.


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