Información general | Estacionamiento medido
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Proyectan cambios
El gobierno de la Ciudad propone un nuevo sistema de estacionamiento medido. Después del fuerte rechazo vecinal a la propuesta de extenderlo a casi toda la ciudad y después de cuatro años de no poder implementarlo por diversas acciones judiciales en contra. El nuevo intento estatiza el cobro del estacionamiento, exime a los residentes en un radio de 300 metros y se podrá abonar por celular. Serán tres las empresas de acarreo de autos mal estacionados.
Por Joaquín Ramírez Souto
Buenos Aires, 6 de noviembre de 2020. El Gobierno porteño envió un proyecto a la Legislatura para estatizar el servicio de estacionamiento medido y cobrarlo a través de aplicaciones como WhatsApp y para modificar el sistema de acarreo de vehículos estacionados en infracción.
La propuesta, además, contempla que los vecinos residentes queden exceptuados del pago de la tarifa por estacionar en un rango de hasta 300 metros de distancia de su domicilio, e introduce cambios dentro del esquema del funcionamiento de las grúas que acarrean los vehículos en infracción.
Los detalles del proyecto
La iniciativa girada a la Legislatura propone una nueva versión de la ley aprobada en 2016 que elevó de 4.000 a 130.000 los espacios tarifados para estacionar en toda la Ciudad y promovió nuevas licitaciones para la operatividad de las grúas. Aquella norma no llegó a implementarse en estos cuatro años por diversas acciones judiciales en contra.
Durante ese período, a excepción de los meses del 2020 en que no hubo cobros ni acarreos por la pandemia, la Ciudad permaneció con el método de los cospeles y monedas para los parquímetros y las 30 grúas que removían autos en infracción para llevarlos a las tres playas activas.
La principal reforma en el proyecto del Gobierno porteño apunta a separar los dos servicios que funcionan de manera conjunta: el sistema de estacionamiento medido, con los parquímetros y las ticketeadoras, y el de las grúas, controlado por las empresas Dakota y BRD con contratos vencidos desde hace 20 años.
"El estacionamiento medido va a pasar a ser gestionado por el Gobierno de la Ciudad", explicó Juan José Méndez, secretario de Transporte y Obras Públicas porteño, durante una videoconferencia con la prensa para explicar los detalles del proyecto, y de la cual también participaron el jefe de Gabinete, Felipe Miguel; y el secretario de Innovación y Transformación Digital, Fernando Benegas.
Según indicaron, se eliminarán los parquímetros para reemplazarlos por un mecanismo de pago basado en el uso de la plataforma Whatsapp, a través de "Boti", el chat del Gobierno porteño, mediante el cual se podrá cargar la patente del vehículo para generar el abono del estacionamiento.
Los funcionarios aclararon que la idea es sumar otras plataformas más familiares para efectuar el pago, y para quienes no cuenten con accesos a las distintas aplicaciones estará la alternativa de comprar "horas de estacionamiento" en los comercios autorizados, tal como se hace con los cospeles.
Por otro lado, se mantiene que los vecinos residentes no paguen por estacionar su vehículo cerca de su domicilio y establece que la eximición sea en un radio de 300 metros de la vivienda.
El proyecto fija distintos tipos de tarifa: la simple y la progresiva que regirán para un tope de 80.000 espacios de los 130.000 previstos en la anterior ley; y una especial que se implementará en zonas cercanas a estadios cuando estén programados encuentros deportivos o recitales.
Cuidado con la grúa
Por otra parte, el proyecto que entrará en debate en la Legislatura prevé cambios al esquema de acarreo, el cual contiene el llamado a licitación por diez años del servicio, pero lleva de dos a tres las zonas de concesión para la Ciudad.
La iniciativa estipula que el servicio estará a cargo de tres operadoras y deberán contar con dos playas de estacionamiento para alojar a los autos multados.
Para la próxima etapa "se priorizarán los acarreos que afecten directamente la convivencia de los vecinos: el estacionamiento indebido en entradas de garajes, rampas, paradas de colectivos, o áreas peatonales es una falta que, no solo entorpece el tránsito, sino que imposibilita que el transporte público se acerque a la parada o que una persona con movilidad reducida pueda cruzar la calle de manera segura", señalaron.