Política | Scioli y Macri se reunieron con Randazzo
09/06
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Se creará la Agencia Metropolitana de Trasporte
El encuentro, calificado como “positivo” por las tres partes, duró alrededor de una hora y concluyó con la premisa de conformar en el plazo de quince días una Agencia Metropolitana de Transporte (AMT) a la que se le encargará la confección de un plan quinquenal sobre la materia incluyendo un plan de obras y de metas de gestión.
Scioli destacó que la convocatoria demuestra la “clara voluntad política y la responsabilidad” que asume el gobierno nacional en la materia y destacó que “es un momento de colaborar, no de confrontar” y así “avanzar en una agenda común que apunte a solucionar los problemas del área”.
Macri, en tanto, se mostró satisfecho, pero pidió avances “concretos” que refrenden esta intención y no dejó pasar la oportunidad para criticar a la Casa Rosada. “Nosotros lamentablemente hasta ahora no hemos podido resolver cosas menores con el gobierno nacional en estos años de convivencia. Así que esperamos que a partir de ahora sí se logre; se ha creado este ámbito y esperamos todos que de esto surjan cosas buenas para la gente”, dejó caer. El tema subtes, que entra en la órbita de la AMT, por ahora fue dejado de lado para poder avanzar en asuntos donde sí haya una coincidencia. De todas formas, Randazzo advirtió que ese tema “tiene que ser parte de la política en esta materia porque hace a un sistema integrado, pero hemos sido muy claros y hay una ley acerca de quién tiene la responsabilidad en ese sentido”.
Randazzo informó al término de la reunión que “La reunión ha sido positiva, han coincidido tanto el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires como el gobernador bonaerense en la necesidad de articular políticas conjuntas para el transporte en el área metropolitana, donde circulan once millones de pasajeros por día”. El objetivo final del nuevo organismo, explicó, es encontrar una forma de mejorar “los tiempos, la seguridad ciudadana en los trenes, la seguridad vial y todas aquellas cuestiones que van a hacer que el ciudadano pueda tener un mejor transporte público”.
En línea con lo planteado por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner el miércoles al anunciar la creación del nuevo ministerio, la Nación le planteó a los dos distritos que continuará aportando los subsidios necesarios (que para este año están estimados en más de 20 mil millones de pesos), pero pedirá a cambio mayor involucramiento en la ejecución y en el control, tanto de los gobiernos provincial y de la Ciudad como de los 44 municipios involucrados, que tendrán su representación en el nuevo organismo. Este lunes los secretarios de Transporte de las tres partes se reunirán para continuar avanzando en la conformación de la AMT.
Las primeras horas del nuevo Ministerio
El jueves Randazzo estuvo reunido durante toda la tarde con su equipo de trabajo delineando la reunión que tuvo lugar el viernes en la Casa Rosada con Macri y Scioli. Fue la primera reunión de trabajo con el secretario de Transporte, Alejandro Ramos, con ese organismo ya bajo la órbita del ministerio que conduce Randazzo. “Se realizó un análisis integral del sector y el planteo de la reunión de mañana” (por el viernes), confió una fuente. Por la mañana, el ministro se había acercado a un taller del Ferrocarril Roca en Remedios de Escalada para comenzar a integrar el área ahora bajo su mando.
La Presidenta anunció por cadena nacional el miércoles el traspaso de la Secretaría de Transporte del Ministerio de Planificación, que conduce Julio De Vido, al del Interior. Además, en el decreto estableció la creación de un ente tripartito para el transporte entre jurisdicciones del área metropolitana. La iniciativa descomprime la situación en el sector de Transporte, atrasado en la puesta en valor de las formaciones y golpeado por el accidente de un tren en la estación de Once. El pase de manos de la secretaría será sin modificaciones en el presupuesto ni tampoco sufrió cambios en su organización por ahora. Los cambios se oficializaron ayer con la publicación en el Boletín Oficial del decreto y, según el texto del documento, el pase desde Planificación a Interior servirá para “profundizar el desarrollo y eficiencia del transporte en sus distintas modalidades, así como maximizar la coordinación y participación de los distintos sectores involucrados, tendientes a la integración y complementación funcional del sector”.
“Lo tomamos con sorpresa, pero con expectativas porque en el PRO siempre somos optimistas. Es una buena medida, en tanto y en cuanto el Gobierno tenga una genuina buena voluntad de trabajar bien, en forma conjunta”, aseguró el jefe de Gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta.
El tema del transporte ha generado una larga pulseada entre el Gobierno de la Ciudad y el nacional por la administración de los subtes, dada la negativa de la gestión PRO a aceptar la transferencia de las seis líneas y el Premetro, a pesar de haber firmado un acta-acuerdo en enero e incluso haber elevado la tarifa más de un 127 por ciento.
Apenas se enteró de la convocatoria, Scioli confirmó rápidamente su asistencia con su jefe de Gabinete, Alberto Pérez, y el secretario de Transporte, Hugo Bilbao. Destacó “la importancia del concepto y el abordaje de área metropolitana” y se animó a plantear otros temas para tratar en la agenda. “Podemos sumar la problemática de la basura”, señaló como uno de los puntos principales, sobre el que mantiene una disputa con la gestión macrista. Además, mencionó a “la seguridad ciudadana para optimizar los recursos humanos y la logística de las fuerzas federales, de lo que hace la Policía Metropolitana” y la Bonaerense.
Metrovías aportó lo suyo
En la semana, la empresa utilizó las carteleras de la red para difundir un mensaje a los pasajeros. Afirmaba que la suspensión del traspaso del servicio le ocasionó “graves dificultades” y que es necesario que la gestión PRO asuma “el control y manejo de la concesión”.
Si bien los altavoces no dijeron “Metrovías informa que Mauricio Macri se tiene que hacer cargo del subte”, la empresa optó por un medio de difusión directa de su posición en la controversia entre el gobierno nacional y el porteño. El Grupo Roggio, que controla Metrovías, utilizó las carteleras que maneja a través de otra de sus compañías para difundir un mensaje a los pasajeros, en el que le reclamó al jefe de Gobierno que asuma su responsabilidad. “Que la Ciudad se haga cargo, nos permitirá acceder de manera inmediata a fondos vitales para la operación de la empresa”, le reclamó.
“El subte es un medio de transporte totalmente seguro”, respondió a los reparos del macrismo para asumir la concesión. La vicejefa María Eugenia Vidal fue la encargada de dejar en claro que nada cambiará. “Esperemos que Metrovías no haga en TBA lo que hizo en los subtes, donde fue cómplice de la falta de inversiones”, los cuestionó.
La disputa por la transferencia del subte a la Ciudad ya está por cumplir medio año. Luego de una resistencia inicial de Macri, los dos gobiernos firmaron un acta acuerdo en enero, gracias a la que el jefe de Gobierno aumentó la tarifa a 2,50 pesos. Luego del accidente en Once, el líder del PRO sostuvo que podía ocurrir lo mismo en los subtes y aseguró que no los aceptaba. Las dos administraciones cruzaron denuncias judiciales, el Congreso aprobó una ley que transfería el subte y las líneas de colectivo urbanas. Pese a lo que aseguraban los macristas, la Legislatura nunca trató ni la ley ni el acta.
La controversia se metió luego en la paritaria del subte y desembocó en un paro que complicó el tránsito porteño. Allí los delegados de dos sindicatos involucrados y la empresa Metrovías reclamaron la presencia del gobierno porteño, El titular de la empresa estatal de subte (Sbase), Juan Pablo Piccardo, se negó cuatro veces a ir hasta que enviaron a la policía a buscarlo. Finalmente, asistió por sus propios medios.
Ayer Metrovías empapeló los pasillos del subte con su posición un texto destinado “a nuestros pasajeros”. Allí señaló que el “traspaso del servicio a la ciudad de Buenos Aires, iniciado el 3 de enero pasado” fue “luego suspendido por el gobierno porteño”.
La concesionaria remarcó que “considera necesario e imprescindible que la Ciudad de Buenos Aires asuma el control y manejo de la concesión, y de esta manera normalizar la situación en la que se encuentra el subte para poder planificar a futuro”. El comunicado pegado en las carteleras tuvo la clara intención de marcarle la cancha a la gestión PRO ante los usuarios, aunque en la empresa señalaron a este diario que “la intención no era generar una polémica. Sí dejar en claro que la empresa está en una situación compleja. Y necesitamos que el gobierno porteño se haga cargo un poco del servicio”. Ante los planteos del PRO, también aclararon que el comunicado no fue consensuado con el gobierno nacional.
Acciones judiciales
El macrismo presentó una nueva demanda por el subte, pero en otro fuero que no es el Contencioso Administrativo, sin informar dónde radicó la causa. A la vez, el gobierno de la ciudad desistió de una apelación en la causa contra el acta-acuerdo para evitar un nuevo traspié judicial.
El gobierno porteño hizo una nueva presentación judicial por el subte. Esta vez, reclamó que se suspenda la aplicación de la ley aprobada por el Congreso Nacional, que transfiere las líneas de subterráneo y de colectivo a la Ciudad, hasta tanto no se firme un nuevo convenio y haya una ley de la Legislatura porteña.
A la vez, la gestión PRO desistió de una apelación en la causa original que había iniciado el macrismo contra el gobierno nacional, dado que consideran que el acta-acuerdo que firmó Mauricio Macri en enero “no tiene validez”. Así, además, se evitaron un nuevo fallo en contra de la Justicia.
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